Que ya son cincuenta y cuatro. Pero que guapa sigues, con tus ojitos alegres, esas pecas que lo cubren todo, las manos diminutas, las uñas mordidas, los pies doloridos, la nariz invisible casi, tu perfil, mi perfil. Siempre con paso firme, con la cabeza erguida y esa voz de pito cuando te enfureces. Casi se me olvida, ya van tres, he estado a punto de llamarte al móvil, ironías de la vida, el número sigue intacto en mi memoria. Hace demasiado o, tal vez, simplemente mucho tiempo que no voy a verte, tanto como los días que hace que te fuiste. Ya me conoces, nunca fui partidaria de pasarme la tarde entre huesos. Siempre estás en mí, a todas horas, no necesito rodearme de plañideras para recordarte. El ritual del regalo, las flores, tu eterna sonrisa agradecida. Me faltas, tanto...
Hoy habrá merendola, algún dulce de los que disfrutábamos, como es tradición cumpleañera. ¿Algo del Divine's? ¡Ei, límpiate la comisura, te has manchado de chocolate, bichejo!
A tu salud. A la nuestra.
3 comentarios:
Molt maku!!!
Sta molt orgullosa de tu, sip, segur! ONITSUKA TIGER
De veritat que és el millor regal que li podies fer!
mil petons blaus de gràcies, petitona meva!!!! ;-***********
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