Iconografía

domingo, 11 de noviembre de 2007

Peor que el 7 de enero en el Corte Inglés

No me transformé en una amazona "fashionista" con ansias de alguna prenda con "print" de leopardo de Cavalli. El jueves día 8 de noviembre no estuve haciendo una cola kilométrica para llevarme uno de los vestidos de lentejuelas que colgaban -¡durante unos minutos tan sólo!- de algunas de las tiendas de H&M. Tampoco lo hice en su día con Victor & Rolf, mi adorada Kilye... ni siquiera con Lagerfeld, Stella McCartney o Madonna. Bueno, os seré franca: de Madonna estuve a punto de comprarme una especie de quimono muy resultón y de Stella un mono, pero bastantes días después del boom mediático, buscando sin buscar.
Pero el resultado de esta última alianza de la firma sueca con el diseñador florentino me ha dejado estupefacta. Arramblar con todo: un trech con tachuelas o un tanga de cebra y gasa.
El mismo día del evento, este jueves pasado, una compañera del máster explicaba que en la tienda de Paseo de Gracia, a los diez minutos de abrir las puertas, presenció, in situ, la reventa de una de las prendas de la colección: "Si me das 120 euros, te la doy a ti, sino se la doy a otro". La pieza de marras no pasaba de los 80 euros. La España de la picaresca.
Victoria Beckham se echaría las manos a la cabeza. Suerte que ya voló lejos de estos lares con aroma de ajo rancio.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Antes muerta que sencilla... María Isabel

Natsuki dijo...

Maria Isabel, mi estilo está bastante alejado de Cavalli, pero reconozco que la locura que ha desatado en H&M me ha dejado muy sorprendida.
Gracias por tu comentario!

Un saludo!