Mafalda habla
Cuando empecé a escribir este blog no había intención subterránea alguna. Bueno... tal vez, cierta función terapéutica de desahogo: artístico y emocional. Entonces era invierno. Casi, casi primavera. Hoy hace frío, no tanto como entonces, pero todavía se me cala en los huesos. Unos días más que otros. Este diminuto mundo de entradas virtuales ya forma parte de mi vida diaria. Pienso, achispada y luminosa unas veces, negruzca otras, sincera siempre -o eso intento. Y os busco entre los comentarios, a los de siempre, a los que llegáis "linkeando" de blog en blog, por casualidad y decidís quedaros un rato y dejar huella, o no.
Nos hacemos falta, me gustaría pensar, como aquella película.
Y no calléis nunca, pero con respeto, eso también...
13 comentarios:
pero tú tampoco calles, eh? abrazos diminutos virtuales (me tomo la libertad), o grandes, o como quieras.
raúl, espero tener ganas durante muuuuuucho tiempo para no hacerlo ;-)
De esos besos, me quedo todos.
Y estos, para ti :-*******
Todo resulta, sino menos, bastante curioso al fin y al cabo. Como no se podría enumerar cada una de nuestras actitudes, inquietudes, preferencias, etc. acerca del Mundo que nos ha tocado estar. Como jamás nos haríamos con un certero inventario ordenado de Aquellos (más bien cerca, más bien lejos de nosotros) que con mayor o menor similitud, acierto, se aproximen, se adhieran a nuestra (personal) Visión de la Vida que llevamos. Todo resulta, sino menos, bastante extraño al fin y al cabo. Quizá en civilizaciones de antaño, lo único que les restaba era el acercamiento personal "de gran nivel", por el mero "corporativismo". Ya fueran religiones, fanatismos, culturas. Ya bien, porque fueran pobres. Ya bien, porque fueran, sólo, ricos. Quizá hoy, debido a la propia evolución de nosotros y de los medios, se haya logrado que se recalquen mucho más los "individualismos". Todo resulta, sino menos, bastante más complejo al fin y al cabo. Entre la simple adición de sujetos únicos y las cada vez menos conseguidas "agrupaciones"... quizá, nos queden simpáticos gestos, tal como Éstos (de lo que abunda, lo menos quizá) "pequeños espacios virtuales" en los que podamos encontrarnos. Aquellos que comparten aficiones, gustos, ideales, preferencias... o tan sólo, por el discreto, espontáneo regalo de un espacio de tiempo, dispuesto, a un comteporáneo, curioso, extraño y complejo medio de conversación... sino menos.
Y aunque parezca mentira hasta nos echamos de menos, casi sin conocernos... o al menos eso es lo que he sentido yo estos dias.
Un abrazo enorme guapísima
Aunque, como en la Vida misma. Unos u otros dejan de aparecer, pero no porque se hayan muerto. No. Sólo porque lo dejan de hacer. Sin más. Como los "compañeros", "conocidos", aMIGOS (con minúscula forzada). Así, sin más. Sin enfados y sin reproches. Y sin muertes. Algunos dejan de llamarte. Uno, de llamarles a ellos. Sin más. Dejamos de saber de sus días. Sin más. Como en la Vida misma.
polyesterday, qué razón tienes...
Un abrazo de sol que no acaba de salir :-*
jc, pues sí! Y es bonito, no? Te busco entre mis entradas, releo los comentarios de las tuyas...;)
Muaaaaaaaaakis!!!!
demon boy, con Mar, mi mejor amiga, me ocurre algo muy similar a lo que comentas. En ocasiones hemos estado tal vez incluso meses sin hablar, sin vernos... pero sabemos que la una tiene a la otra y, viceversa. Y es maravilloso: no exigir nada, pero sabiendo que tienes la certeza de que vas a tener allí a la otra persona cuando la necesites...
Un saludo de hambre ;-)
Entro por primera vez en tu blog y me siento reflejada en este post tuyo. Muchas gracias. No me salvaré.
Besos
Nunu ;-)
Encantada de tenerte por el blog!!
Los de siempre estamos, esperando a que silbes para volar a tu lado. El mundo nos ha dado la oportunidad de ser amigas y no la hemos desperdiciado ni un minuto. Siempre, aunque estemos eones sin vernos.
Besos de nenúfar malva.
thalassa, lo mismo digo: ahora, entonces, mañana.
Y que t'eztimuuuuuu, molt, moltíssim!!!!!
:-**********
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